No son pocas las ocasiones en que las empresas de diseño web nos encontramos en situaciones extrañas y surealistas al tratar con un cliente que necesita una página web, o un blog, o algo….
No tenemos mucha idea de mecánica, ni de bricolaje ni de otras cosas, así que intento hacerme a la idea de que el profesional que necesito contratar, y que se dedica a lo que busco, sabrá aconsejarme y explicarme las opciones.
Me sorprende es que los clientes suelen preguntar por el precio de la página web antes, incluso, de explicar que es lo que necesita. No hablamos de especificaciones técnicas, sino de "para qué quieres la página o lo que quieres hacer con ella".
El precio, por descontado, es un facto a tener en cuenta, pero no deberíamos empezar la casa por el tejado y, para decir que no te llega el presupuesto siempre hay tiempo y no pasa nada por explicarte así que, si no es mucho pedir, primero dime que necesitas, y yo te hablo de opciones.
Y nos podemos ir al extremo contrario, al que ya ha mirado, googleado, preguntado, consultado, etc… y parece que tiene bastante claro que es lo que necesita… o al menos eso dice ellos.
Suele ser algo así como ‘quiero algo muy sencillo porque lo tengo muy claro‘.
Si el diseñador web pregunta por el tipo de diseño, paleta de colores, ejemplos de otras páginas, etc… el cliente también suele tener 2 respuestas contrarias:
- Eso es tema vuestro porque yo no se de diseño y vosotros seguro que sabéis lo que va bien para mi empresa (y luego te dice que no le gustan los tonos oscuros, los círculos o las imágenes grandes, o pequeñas, o medianas, o sin imágenes,…)
- El cliente te muestra una página y te dice ‘como esta’. Y si la página de ejemplo tiene 5 columnas de texto al inicio, el cliente se vuelve loco intentando encontrar 5 textos con los que rellenar ese diseño (aunque tu le digas que si tienen que ser 3 no pasa nada).
Aunque también tenemos el caso del "diseñador low cost" que ofrece sus servicios a precio de taller textil tercermundista, y que le dice al cliente que no preocupe de nada, que el sabe lo que necesita, etc… y que acaba pillando la misma plantilla de sus otros clientes, le ‘incrusta’ de mala manera su logo y su nombre de empresa y, sorpresa, le pide 5 textos para las 5 columnas…
Por eso no es siempre culpa del cliente, de no saber explicarse, o de tener miedo a explicarse demasiado, sino de los desarrolladores que viven del copy/paste, que tienen cogida la instalación del wordpress y las 5 plantillas fijas, y no se molestan en explicarle a su cliente que, en realidad, se les queda grande montar un cms para una página web presencial.
Para rematar conozco otras empresas que venden páginas web presenciales con 3 secciones máximo y un formulario de contacto a escoger entre unas decenas de plantillas que es lo que, algunos proveedores de hosting, te regalan cuando les contratas un dominio, pero con un límite de 3 secciones que es el paquete gratuito incluido.
Las empresas confían más en una imprenta que les diseña el logotipo gratis y les cobra 1000€ por 500 tarjetas, que cualquier estudio de diseño gráfico profesional…. y cuando se trata de páginas web "que puede hacer cualquiera", la desconfianza bate records.
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