
Una de las principales cualidades de la fotografía de reportaje es la honestidad. Probablemente, esto es lo que determina el interés y el respeto por el género, tanto de los profesionales de la industria de la boda como de los recién casados.
Hoy queremos informar a los lectores sobre las personas que pueden muy bien hacer un fotoperiodismo y saber cómo captar las emociones más vívidas. Los nombres de alguien han estado por mucho tiempo entre los expertos en fotografía de bodas y reportajes, alguien acaba de comenzar su carrera profesional y ya ha logrado el éxito en este género. Lo principal aquí es que la fotografía es una historia, y nuestros héroes tienen algo que contar.
La boda tiende a ser el evento más memorable de nuestra vida. ¿Qué las hace tan memorables? Bueno, las fotografía únicas e inigualables de bodas que convierten a una gran boda en la ocasión más inolvidable.
El día de la boda es la ocasión perfecta para brillar. Por supuesto, quiere verse maravillosos pero también quiere estar radiantes, seguros, sexy y coquetos. Recuerda, este día tan especial todas las miradas estarán en los novios y es importante que rebose de confianza sin ninguna preocupación. Esta belleza quedará en los recuerdos y las fotografías que durarán toda la vida.
La esencia misma de la fotografía de reportaje no se puede cambiar, solo se pueden agregar algunos chips técnicos y efectos especiales. El fotoperiodismo de boda elegante siempre es lo primero. Hubo una ola de experimentos con la composición, con cambios en las proporciones en el marco, luego se encendió una ola de marcos muy contrastantes (trabajando con un patrón de corte), ahora la gente está utilizando activamente varios dispositivos de luz (flashes, paneles de led). Para agregar "calidad" en el marco, los fotógrafos más experimentados disparan "reportajes dirigidos". Probablemente, esto es lo más difícil: administrar el proceso durante todo el día, analizar cada marco y enviarlo como un reportaje. Esto requiere una gran experiencia y, lo más importante, una visión del encuadre final.
La fotografía de bodas, es el proceso en sí, cuando todo el día transcurre en el mismo aliento, esto es una agradable vanidad. La mayoría de los fotógrafos novatos cometen el mismo error: prueban mucha creatividad, olvidando las tomas importantes y necesarias que sus clientes recordarán más adelante.
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